Un bebé de tres meses, identificado como Adrian Manuel Vargas Espinoza, llegó sin signos vitales el viernes pasado, 26 de enero, al hospital Dr. Raúl Leoni de Guaiparo en San Félix, del estado Bolívar. Los médicos determinaron que la causa de muerte fue desnutrición.
Trabajadores del centro de salud relataron que la madre no podía amamantarlo porque había sufrido varios episodios de paludismo y también presentaba un cuadro de desnutrición. Lo alimentaba principalmente con agua de auyama.
Se pudo conocer que este hospital de Ciudad Guayana en lo que va de 2018 han fallecido otros tres niños con la misma condición.
La muerte del bebé ocurrió el mismo día que la Unicef emitió un comunicado manifestando su preocupación por el aumento de casos de desnutrición en Venezuela producto de la crisis económica que no permite garantizar a los niños el acceso a la salud, medicamentos y a una alimentación adecuada.
El organismo internacional criticó que el país no existen cifras oficiales actualizadas sobre la incidencia de esta enfermedad. Sin embargo, citaron datos como el informe de agosto de 2017 de Cáritas Venezuela que reveló que 15,5% de los niños evaluados tenían un peso bastante más bajo de que deberían para su edad y un 20% adicional de niños presentó riesgo de desnutrición.
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