La arquidiócesis de Valencia informó este jueves 1 de octubre sobre el fallecimiento por COVID-19 del presbítero Julio Rodríguez, párroco de la parroquia San Blas, al centro-sur de la capital carabobeña.
Rodríguez llevaba algunos días hospitalizado, sufriendo afecciones respiratorias graves asociadas al coronavirus, por lo que tuvo que solicitarse para él varios donativos de medicinas para atender la complicación.
El prelado tenía 61 años, más de 30 de ellos consagrados al sacerdocio. Estudió en la Universidad Central de Venezuela y en el Seminario San José de El Hatillo, Caracas.
El arzobispo de Valencia, monseñor Reinaldo Del Prette Lissot, lamentó ese deceso y se unió en oración junto con los feligreses de San Blas por el descanso en paz de su párroco.

Murió en una clínica privada de Valencia, luego de permanecer 22 días hospitalizado.
Tras la hospitalización del padre, se iniciaron cadenas de oraciones a través de la redes sociales; por la recuperación del sacerdote de San Blas; parroquia donde era muy querido por sus gestos de solidaridad y ayuda.
“Oramos para el que el Señor le conceda la vida eterna, la cual creyó y esperó en su misterio sacerdotal”, refirió la nota de condolencias.
Es el segundo miembro de la Iglesia católica en Carabobo que fallece por esta causa. El primero fue el padre Alex Guillermo González Graterol, de 64 años, párroco de Nuestra Señora del Carmen en el municipio Miranda.
Su servicio pastoral se desarrolló en la parroquia Nuestra Señora de Belén, en el municipio Carlos Arvelo, donde fue administrador parroquial. Fue párroco del Santo Cristo y San Isidro Labrador en Macapo, perteneciente a la Diócesis de San Carlos estado Cojedes.
Recientemente, el arzobispo Reinaldo Del Prette, emitió un comunicado pidiendo a los integrantes de la comunidad religiosa extremar las medidas de seguridad para evitar contagios de Covid. En Carabobo hasta el momento se han registrado 943 contagios y 28 personas han muerto.