El módulo Nauka de Rusia causó pánico cuando sus cohetes se activaron accidentalmente después de acoplarse a la Estación Espacial Internacional (EEI), arrojando a la estación fuera de su posición. Nauka despegó la semana pasada desde el cosmódromo de Baikonur, transportado por el cohete Protón y representa el primer lanzamiento de Rusia a la Estación Espacial en 11 años. Todo esto ocurre mientras Rusia busca impulsar su industria espacial, que se ha quedado rezagada desde el colapso de la Unión Soviética y lucha por mantenerse al día con la competencia de EE.UU.

Nauka, que también se conoce como el módulo de laboratorio multipropósito, estaba originalmente programado para lanzarse en 2007, pero problemas técnicos y reparaciones inesperadas ocasionaron años de retraso. El módulo expande el lado ruso de la EEI, agregando más instalaciones científicas, cuartos para la tripulación y una nueva esclusa de aire para caminatas espaciales. También cuenta con un nuevo puerto de acoplamiento.

Pero Nauka no tuvo un viaje tranquilo a la órbita. Poco después del lanzamiento el 21 de julio, tuvo problemas de propulsión y comunicaciones impidiendo que la nave espacial entrara en su órbita prevista. Los ingenieros y controladores de misión rusos tuvieron que instruir al módulo -de 13 metros de largo y 22 toneladas- para que activara sus propulsores de respaldo, a fin de volver a su curso y no se quemara en la atmósfera terrestre. Una vez que recuperó el equilibrio en una órbita “normal” continuó con su viaje de ocho días hasta la estación espacial, donde atracó de forma autónoma. Al acoplarse a la estación espacial el jueves por la mañana, parecía estar listo para operar.

Tres horas después de su llegada, a las 12:34 pm (hora de Venezuela), Nauka de repente comenzó a encender sus propulsores. Los astronautas dijeron a los controladores de vuelo en la Tierra, que estaban viendo algo extraño por sus ventanas. El periodista espacial Anatoly Zak fue uno de los primeros en enviar sus observaciones, tuiteando: “se ven numerosas partículas fuera de la estación, lo que indica una fuga importante de propulsor o de un conducto de gas”. Los controladores de vuelo aconsejaron a la tripulación de la EEI que mantuviera cerrada la escotilla y las ventanas de 4 cm de espesor. Las comunicaciones con los controladores terrestres también se interrumpieron dos veces durante varios minutos.

En respuesta a la falla, los controladores de la misión comenzaron a encender los propulsores del módulo de servicio Zvezda, unido a la EEI. Pero al seguir en funcionamiento los propulsores del Nauka, donde ambos luchaban entre sí, con Nauka desalineando a la EEI y Zvezda tratando de corregir la órbita, en lo que llamaron un “tira y encoge” para tratar de solventar el problema. A la 1:30 pm, los controladores de vuelo anunciaron que los propulsores de Nauka finalmente habían agotado el combustible y dejado de actuar, recuperando el control de la órbita de la estación. El posicionamiento es clave para obtener energía de los paneles solares y las comunicaciones.

Durante los 47 minutos que duró la zozobra, Nauka hizo girar la estación unos 45 grados. “Todos los demás sistemas de estaciones funcionan perfectamente. Ninguno de los otros aditamentos sufrió daños”, dijo la NASA el jueves por la tarde. A las 2:15 pm, los controladores de vuelo rusos confirmaron con la NASA que habían desactivado los erráticos propulsores.

Los controladores les pidieron a los astronautas que revisaran el costado derecho (estribor) de la estación para ver si había escombros o algún daño en el exterior. Hasta el momento de escribir este artículo, los astronautas no habían informado de nada malo. ¡Ni siquiera sintieron que la estación se “meneaba” durante el incidente! En la rueda de prensa, Joel Montalbano, gerente del programa de la estación espacial de la NASA, cuenta la conversación que tuvo con uno de los astronautas: ¿Le preguntaste a la tripulación si se percataron del evento? El astronauta inmediatamente gritó a sus compañeros, “Oye, ¿tembló en la estación o algo así?”, y la respuesta fue negativa.

Si la situación se hubiera vuelto tan peligrosa como para requerir la evacuación del personal, la tripulación podría haber escapado en la cápsula de SpaceX, aún estacionada en el puesto de avanzada y diseñada para servir como un “bote salvavidas”.

Una pérdida repentina de control sobre la orientación de la estación espacial “no es algo común”, dijo la NASA. Eventos como el del jueves solo han sucedido tres o cuatro veces en los 20 años de historia de la estación espacial. Sin embargo, no está claro qué causó que los motores se encendieran repentinamente. Pero Zak escribió que el control de la misión de Rusia descubrió una fuga de gas helio en los tanques de Nauka, lo que pudo haber provocado la activación de los propulsores.

La NASA y la agencia espacial rusa, Roscosmos, pasarán los próximos días investigando el incidente. Roscosmos se encargará del análisis de Nauka, mientras que la NASA se centrará en evaluar las estructuras de la estación espacial en busca de averías. Se requerirá muchas maniobras, incluidas once caminatas espaciales a comienzo de septiembre, para que Nauka comience a operar en la Estación Espacial.

Este incidente llevó a la NASA a posponer hasta el 3 de agosto el lanzamiento planeado de la nueva cápsula CST-100 Starliner de Boeing, en un vuelo de prueba sin tripulación muy esperado. Será el segundo intento de Boeing por llegar a la estación antes de embarcar astronautas.

Lo acontecido se suma a las declaraciones dadas en abril por parte de Rusia, donde indicó que estaba considerando retirarse del programa de la EEI, argumentando una infraestructura obsoleta, planeando lanzar el primer módulo central de una nueva estación orbital en 2025. Además, Rusia ha anunciado una serie de proyectos en los últimos años, incluida una misión a Venus y una estación en la Luna, siempre y cuando superen los incidentes como el de Nauka.

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Profesor-Investigador Universidad Central de Venezuela • Miembro de la Academia Nacional de Ingeniería y Hábitat • Editor de la Revista Catálisis • Presidente (H) de la Sociedad Venezolana de...