A los 68 años de edad y tras una dura lucha contra el cáncer de pulmón, “El Holandés Volador”, como también se le conocía a Johan Cruyff, histórico futbolista neerlandés, falleció este jueves, 24 de marzo, en Barcelona, la ciudad que lo vio convertirse en un ícono del F.C. Barcelona y en el entrenador que le dio el primer trofeo de Copa de Europa de clubes (ahora Champions League) en 1992.
La muerte de Johan Cruyff ha entristecido al mundo futbolístico. Fumador durante muchos años, en 2015 le fue diagnosticado cáncer de pulmón, pero en 1991 ya había sobrevivido a una operación a corazón abierto. Tras esta intervención dejó de fumar cigarrillos y comenzó a comer paletas (chupetas en Venezuela) para paliar la ansiedad, hecho que se hizo muy popular y vistoso, puesto que el holandés comía al menos cinco en cada partido como entrenador.
El nombre completo de “El Tulipán de Oro” era Hendrik Johannes Cruijff, pero fue conocido internacionalmente como Johan Cruyff. El jugador nació en Ámsterdam el 25 de abril de 1947 y comenzó su carrera futbolística desde temprana edad en la academia del Ajax de Ámsterdam (vivía a medio kilómetro del campo del club), uno de los equipos más exitosos de Holanda y de Europa. La madre de Cruyff era parte del personal de limpieza del equipo y le pidió al entrenador de las categorías infantiles que escogiera a “Jopie (según le llamaba su madre)” para formar parte de las inferiores del club entre una población de 300 niños.
Desde ese momento la vida de Cruyff cambió por completo. El 8 de julio de 1959, cuando tan solo tenía 12 años, su padre murió de un infarto y Johan dejó los estudios para dedicarse completamente al fútbol y poder ayudar a su madre en el mantenimiento de la casa.
Cruyff era muy delgado y uno de sus tantos apodos era “el flaco”. Resaltaba en las inferiores del equipo por su calidad y fiereza, pero también por su delgadez. Por ello, el histórico entrenador Rinus Michel (padre del llamado “Fútbol Total” reconocido sistema de juego de la selección neerlandesa de fútbol, conocida en su época como la “naranja mecánica”) decidió crear un programa de entrenamiento especial para poder desarrollar el físico de Cruyff y hacerlo aguantar los rigores de una carrera como futbolista profesional.
El 15 de noviembre de 1964, con 17 años de edad, hizo su debut oficial en la Primera Liga neerlandesa con el Ajax de sus amores ante el GVAV Groningen (hoy F.C. Groningen) y demostró su valía al anotar el único tanto de ese partido y darle la victoria al conjunto de la capital neerlandesa. En la temporada 1966-1967 se convirtió en el goleador de la liga holandesa con 33 tantos y ya tenía un puesto seguro en la titularidad del Ajax.
Poco a poco el holandés se convirtió en un referente del fútbol mundial y especialmente en una de las figuras que demostraba cómo los neerlandeses veían y jugaban al fútbol. Cruyff ganó el Balón de Oro en tres ocasiones (1971, 1973 y 1974) el primero como jugador del Ajax y los dos últimos como futbolista del Barcelona, equipo donde explotó toda la capacidad de “El Tulipán de Oro”.
El fichaje de Cruyff por el Barcelona es, si se quiere, una de las muestras de rebeldía más grandes del jugador. A Johan lo iban a vender al Real Madrid y, al saberlo, Cruyff se negó a aceptar el fichaje y decidió hacerlo por el máximo rival del club de la capital española, evidentemente el F.C. Barcelona. Allí Cruyff fue recibido como un héroe sin siquiera haber tocado el primer balón en el equipo culé. En la temporada 1973-1974, cuando el holandés llegó al Barcelona, el equipo catalán se encontraba penúltimo en la liga y tenía 14 años sin poder ganar la Primera División española. “El Holandés Volador” no decepcionó a su afición y, gracias a él, el Barcelona dio un giro abrupto y comenzó a ganar, de hecho, luego de la llegada de Cruyff, el conjunto culé no perdió más en esa temporada y pasó de estar en puestos de descenso a ganar la tan ansiada novena liga y cortar la sequía de los 14 años.
En el Mundial de Alemania 1974 fue el primero para Cruyff. La selección neerlandesa estaba siendo dirigida por Rinus Michel, el mismo que le diseñó el programa especial para desarrollar el físico de “el flaco”. Allí Johan se encontró con tipos como Johan Neeskens, con quien construyó una fuerte amistad y formó parte de un sistema de juego apodado Fútbol Total, sistema que se basa en tres puntos: tener la máxima posesión del balón, presión sobre el rival y una fluida triangulación hasta llegar al arco rival. De esta manera la selección holandesa resaltó entre todas las demás en esa Copa del Mundo, llegando hasta la final para ser derrotada por los anfitriones y así quedar a un paso de ganar la primera Copa del Mundo para el país. A pesar de esta gran participación, Cruyff, nuevamente en su rebeldía, no volvió a disputar ningún otro mundial y se retiró como jugador del balompié en 1984.
No pasó mucho tiempo para que Johan Cruyff se convirtiera en entrenador de fútbol y comenzó su nueva faceta en el banquillo del Ajax de Ámsterdam entre 1985 y 1988. Allí ganó la Copa de los Países Bajos en dos ocasiones consecutivas (1986 y 1987) y la Recopa de Europa (1987). En su estadía potenció la carrera de jugadores como Ronald de Boer y su hermano Frank, también contó con jugadores como Edgar Davids y Clarence Seedorf, quienes se convirtieron en referencias del fútbol holandés en los años 90 y en la primera década del 2000.
Luego, Cruyff pasó a dirigir al F.C. Barcelona y allí lo volvió a cambiar todo. En 1988, cuando llegó a Cataluña, el equipo culé pasaba nuevamente por una crisis deportiva e institucional, similar a la que se vivió cuando Cruyff llegó como jugador. El holandés decidió trabajar a largo plazo en el club y vendió a diversos jugadores de la plantilla para empezar prácticamente de cero. En la primera temporada (1988-1989), Cruyff ganó la Recopa de Europa con el Barcelona y fichó a Michael Laudrup, quien se convertiría en un importante jugador del conjunto catalán. El Barcelona de Cruyff ganó la Copa del Rey en 1990, luego ganó La Liga española en 1991, 1992, 1993 y 1994; estableciendo un poderío en el país ibérico. Pero en 1992, Cruyff hizo lo que pocos pensaban. Con el triunfo de su sistema de juego inspirado en el Fútbol Total de Rinus Michel y con una construcción envidiable del mediocampo, el F.C. Barcelona consiguió ganar su primera Copa de Europa (hoy Champions League) en un partido aguerrido ante la Sampdoria que terminó en empate en los 90 minutos y se definió con un golazo del holandés Ronald Koeman en el minuto 111’ de juego.
Luego de esa alegría Cruyff dirigió al Barcelona 4 años más, hasta 1996.
El “Holandés Volador” tiene un palmarés impresionante. Como jugador ganó la Copa de Europa en 3 ocasiones (1971, 1972 y 1973) todas con el Ajax. Además, con ese mismo equipo ganó una Copa Intercontinental (1972) y una Supercopa de Europa (1972). Fue nombrado como el Mejor Jugador de los Países Bajos en 5 ocasiones (1967, 1968, 1969, 1971 y 1984). Fue nombrado como el Mejor Jugador del Mundial de Alemania 1974 y está incluido en la FIFA100, la lista de los 100 mejores jugadores de fútbol del siglo XX.
La calidad y personalidad de Cruyff abrió la puerta para la llegada de jugadores como Ruud Gullit, Frank Rijkaard, Marco Van Basten, entre otros.
El histórico número 14 holandés vivirá por siempre en la memoria de todos aquellos que alguna vez disfrutaron del Fútbol Total y, especialmente, en los que ven jugar a equipos como el F.C. Barcelona en la actualidad, equipo que aprehendió casi como una institución el buen trato al balón y que sea la presión, la precisión y la posesión los artefactos más peligrosos en el sistema de juego del equipo.