Este lunes decretado no laborable por el presidente Nicolás Maduro fue aprovechado por personas para probar suerte en la compra de productos regulados. En las largas filas en las afueras de los supermercados había gente de diferentes partes de la ciudad, pero también de lugares más lejanos. “Yo soy zuliano, pero me vine a vivir a Caracas porque allá la cosa está fea”, dijo Junior Alviar, quien llegó a la cola del Abasto Bicentenario de Plaza Venezuela a las 6:00 am. “Al parecer, van a vender pañales, pero son las 10:30 am y todavía no han abierto”, dijo.
Judith Pérez, en el Unicasa de La Candelaria, exigía que primero le vendieran alimentos a los que estaban en fila desde temprano “y después que le vendan a los bachaqueros, que son los que pasan sin hacer cola”.
En el supermercado Plaza’s del Centro Plaza, una mujer de 53 años, que pidió no publicar su nombre, llegó a las 6:30 am procedente de Los Chaguaramos. “Tengo dos meses sin comprar harina Pan porque cuando hay, no tengo dinero; y cuando tengo dinero, no hay”, dijo. Un vecino del sector El Cementerio, que también se reservó su identidad, llegó a las 7:00 am al Farmahorro de Altamira porque estaban vendiendo crema dental y jabón de baño. “Yo vivo en El Cementerio y allá los colectivos tienen todo eso agarrado para ellos”, contó a Efecto Cocuyo a las 11:50 am, cuando aún esperaba para comprar.
Inseguridad en las colas
La inseguridad era tema de debate entre muchos de los que hacían las colas. Verónica Sanabria hacía fila en Farmarket, ubicado en la avenida Francisco de Miranda. Esperaba para comprar harina, aceite, mantequilla, pañales y leche. Explicó que “en el municipio Chacao hay más seguridad en estos tiempos, porque antes robaban en cualquier establecimiento”.
Este lunes en la mañana fue asesinado Junior Pérez, de 28 años de edad, mientras hacía cola para comprar alimentos en el supermercado Central Madeirense, en el Centro Comercial Puerta del Este, en La California. Unos sujetos aún no identificados le propinaron cinco disparos en la espalda