A dos meses de la primera inmersión de la operación “Agua Bendita”, realizada en el embalse de El Guri, estado Bolívar, este jueves 5 de mayo se realizó la segunda fase de la misma. Esta se hace para inspeccionar los niveles de reserva de agua que movilizan las turbinas de la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar y de las centrales Francisco de Miranda (Caruachi) y Antonio José de Sucre (Macagua).
Luis Motta Domínguez, ministro de Energía Eléctrica, declaró que era una operación cívico-militar que contó con la presencia del equipo de buceo de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), además de la colaboración de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y el Ejército Bolivariano.
A través de la señal de VTV, Motta Domínguez aseguró que esta segunda inmersión se hace con el fin de verificar físicamente la distancia que existe entre la superficie y la boca de toma de agua de la Casa de Máquinas 2, que la vez pasada arrojó como resultado que entre la cota de 249 metros sobre el nivel del mar y la toma de agua existían 11 metros de distancia. Esto permitirá poder tomar las decisiones pertinentes para “seguir brindado el servicio” al pueblo venezolano.
Este 6 de mayo planifican revisar los niveles de toma de agua de Tocomita para verificar la cantidad de agua que queda para suministrar a Ciudad Bolívar.
“Los pronósticos son buenos a pesar de que persiste la sequía”, afirmó Motta Domínguez.
El ministro aseguró que se están obteniendo resultados porque ya se comunican las lagunas. Asimismo, aprovechó la oportunidad para recordar la importancia del consumo eficiente de energía eléctrica.
También estableció que se estaba dando cumplimiento a una instrucción del presidente Nicolás Maduro, que establece que hay que cambiar el esquema del entrenamiento militar por lo que en la operación participaron el teniente coronel Alexander Michelena Briceño del 509 Batallón de Dirección de Operaciones Especiales Domingo Montes y algunos jóvenes oficiales.