El fiscal federal de Manhattan a quien se le pidió presentar su renuncia junto con otras 45 personas el pasado viernes, 10 de marzo, no tiene planes de hacerlo, lo que puede forzar un posible enfrentamiento con el presidente Donald Trump y el Departamento de Justicia, según una nota publicada hoy en el New York Times.
Preet Bharara, cuya oficina estuvo al frente del caso de acusación de los sobrinos de Cilia Flores y el presidente Nicolás Maduro por narcotráfico, está además supervisando un caso contra un alto asesor del gobernador Andrew M. Cuomo y una investigación sobre personas cercanas a Alcalde Bill de Blasio de la ciudad de Nueva York, explica el diario.
Según el medio estadounidense, el fiscal ya ha dicho a varias personas que no entregaría la renuncia este viernes, como le habría solicitado el fiscal general adjunto, Dana Boente. Pero además, no tiene intención de hacerlo tampoco durante el fin de semana, según dijo en conversaciones con allegados, una medida que según el NYT “podría doblarle el brazo a la administración Trump”.
En la nota periodística se explica que Bharara había solicitado al presidente Trump permanecer en su puesto actual durante una reunión a finales de noviembre, a pocas semanas después de la elección presidencial. Bharara se había reunido con Trump en la Trump Tower, y luego había informado a la prensa que había pedido permanecer como fiscal, y había manifestado al Presidente su promesa de hacerlo.
Sin embargo, Bharara fue uno de los 46 cargos remanentes de la administración Obama que recibió una llamada el viernes, 10 de marzo, diciéndole que debía renunciar.
Funcionarios de la Casa Blanca y el Departamento de Justicia no han respondido a la prensa sobre cómo van a manejar el caso del fiscal Bharara.
Uno de los republicanos electos por Nueva York expresó su apoyo a Bharara el sábado, 11 de marzo. “Bien por Preet (Bharara), que está haciendo el trabajo para el que fue designado!”, escribió en Twitter Brian M. Kolb, líder de la primera minoría de la Asamblea Estatal.
El asambleísta Steven F. McLaughlin, también republicano, había instado a presidente Trump y al fiscal general, Jeff Sessions, a reconsiderar la solicitud este viernes. Pero hoy escribió en Twitter: “Gran error”.
El Distrito Sur de Nueva York, que el Sr. Bharara ha supervisado desde 2009, abarca a todo Manhattan, lugar de residencia de Donald Trump antes de ser elegido Presidente, así como el Bronx, Westchester, y otros condados al norte de la ciudad de Nueva York.
Trump acusó al expresidente Barack Obama el pasado fin de semana de las escuchas telefónicas en la Torre Trump en Manhattan, acusación que aún requiere probatoria.
Por su parte, los investigadores federales buscan determinar si existe una conexión entre las autoridades rusas y la campaña Trump. Los funcionarios de inteligencia creen que hackeo de los correos electrónicos que pertenecen al partido Demócrata y a funcionarios de la campaña de Hillary Clinton, habría sido orquestado por el Kremlin.