Cuando se decretó el estado de emergencia en Perú, una de las principales preocupaciones de los padres y representantes con hijos en edad escolar era qué pasaría con las clases. Lo primero que se planteó fue un programa académico impartido a través de Internet, pero esta opción enfrentaba un gran problema: el país no está del todo conectado, no es un servicio que llegue a todas las regiones.
Sin embargo, con el fin de la primera fase del aislamiento social y el inicio de la segunda, el Ministerio de Educación (Minedu) presentó la multiplataforma Aprendo en casa, una estrategia inédita en el país: no solo involucra Internet, sino también la televisión y la radio, para poder llegar a las zonas más remotas.
El contenido de las clases está basado en la malla curricular ya establecida por el Minedu. Está adaptada a distintas realidades estructurales, económicas y contará con las siguientes opciones:
Internet. Mediante esta opción los representantes pueden acceder a través de aprendoencasa.pe. El acceso es gratuito, por lo que no afectará la tarifa de Internet. En el portal hay opciones de textos y evaluaciones que se deben desarrollar con apoyo de un adulto.
TV. La otra opción es la televisión, que está al alcance de un porcentaje importante de la población. Para tal fin se desarrollaron audiovisuales de una hora de duración que serán transmitidos por el canal estatal Tv Perú. Y, en caso de presentarse algún contratiempo que impida tomar la clase, esta se podrá recuperar a través del canal de YouTube de Perú Educa.
Radio. Se trata de la única opción para los estudiantes de las zonas alejadas de la tecnología, como los caseríos y zonas rurales. También se apoyará de estaciones locales con mayor capacidad de penetración. Además contará con contenidos en las lenguas originarias: quechua (Chanka, collao y central), aimara, shipibo, ashaninka, awajún, yanesha y shawi.
“Será una oportunidad para repensar la forma cómo nos hemos venido educando y cómo educamos”, explicó el ministro de Educación, Martín Benavides. Detalló que se difundirán por una semana contenidos directamente vinculados a temas de ciudadanía: “Estarán enfocados en cómo nos relacionamos, rutinas físicas para hacerlas en casa y cómo padres, hijos y amigos pueden interactuar a distancia para afrontar estos momentos”.
Para las plataformas de TV y radio, los padres contarán con un correo electrónico o un número de celular para contactar al maestro ante cualquier duda. A través de estos mecanismos se deben enviar las tareas y fotos de las niños mientras las elaboran.
También serán visitados por tutores de la autoridad municipal de educación de manera aleatoria para verificar el buen cumplimiento del plan escolar.
La respuesta de la audiencia
El año escolar bajo esta modalidad inició formalmente el 6 de abril y, en lo que respecta a la opción televisiva, la cifra de audiencia superó a cualquier programa de la televisión comercial.
De acuerdo con los reportes del Instituto de Radio y Televisión del Perú (Irtp), la estrategia Aprendo en casa llegó a un total de 4.3 millones de personas que optaron por la educación a distancia: “Tuvimos 13.7 puntos de rating (386 mil hogares); en primaria, 15.5 puntos (435 mil familias) y en secundaria 5.7 puntos (167 mil), superando así las expectativas del Minedu”.
Detalló el Irtp que en los dos primeros niveles hubo más audiencia que los canales comerciales, liderando en los horarios de (10 a.m. y 10:30 a.m.).
¿Qué dicen los padres?
Pero, para algunos “no es lo mismo”. Así lo describe Albert Paiva, padre de un estudiante de primer grado. Señaló que hay aspectos que se deben corregir. “Por ejemplo, mi hijo aún no domina bien la escritura y lo mandaron a escribir. Creo que eso no está bien”. Relató que a cada actividad realizada, se le toma una fotografía y, junto a la imagen de la tarea, se le envía a la docente para que haga la respectiva evaluación.
Por su parte, Jessica Herrera contó que es una experiencia nueva para todos, incluyendo a los docentes. En su caso, “la miss” —como se conoce a una maestra de primaria en Perú— creó un grupo de WhatsApp por el que hace indicaciones antes, durante y después de la clase televisada. Luego, asigna una tarea que debe ser compartida en el mismo grupo. “Es una gran iniciativa, pero necesita del apoyo de todos. Hay que ser constantes porque los niños al estar en casa van a querer comer o se distraen. Uno tiene que estar ahí, poner carácter y hasta ser rígido”, dijo Herrera.
Aprendo en casa se presenta como una alternativa para un país con una población en edad estudiantil de aproximadamente 8 millones.