Jimmy Durmaz, jugador sueco de ascendencia turca, fue amenazado de muerte por parte de algunos fanáticos suecos que también arremetieron contra su familia luego de que el futbolista ocasionara la infracción que derivó en el gol del alemán Toni Kroos en el partido celebrado el pasado sábado, 23 de junio, en el que Alemania venció a Suecia con un tanto en el tiempo de descuento.
Durmaz no fue titular en ese partido entre suecos y alemanes, pero ingresó como cambio en el minuto 74 por Viktor Claesson para ocupar un puesto en el sector medular del equipo que sufría una y otra vez los embates alemanes que tenían que ganar el compromiso para llegar en mejor posición al encuentro final ante Corea del Sur.
En el minuto 90+3, Durmaz derribó a Timo Werner en el borde del área sueca y esto le dio la posibilidad de oro a los alemanes. Toni Kroos y Marco Reus prepararon una jugada de dos toques para que Kroos definiera de forma espectacular en un disparo que tuvo una curva impresionante para atravesar la tupida área sueca y colarse en la esquina superior del guardameta Robin Olsen.
Alemania ganó el partido y Suecia queda ahora comprometido a definir su clasificación ante México, uno de los mejores equipos del grupo F y de la Copa Mundial Rusia 2018.
Racismo y amenazas de muerte
Jimmy Durmaz es uno de los talentos prominentes de Suecia. Tiene 29 años y juega en el Toulouse de Francia, debutó con la selección sueca en 2011 y se hizo con un puesto en el equipo para la Eurocopa 2016 y para el Mundial de Fútbol.
Dentro de las amenazas que recibió el jugador de ascendencia turca, algunos fanáticos insultan a Durmaz por no ser “un sueco puro” y amenazaron con atacarlo a él y a su familia que reside en Suecia.
El jugador respondió a las amenazas e insultos y destacó que “al ser un futbolista de alto nivel, se acostumbra a recibir insultos y a dejarlos pasar por alto”, pero aseveró que, en esta ocasión, los comentarios han sido mucho más ofensivos.
Sus colegas de la selección sueca también arroparon al jugador y, luego de una sesión de entrenamiento, se pararon a las espaldas de Durmaz mientras este leía un comunicado que finalizaba con “Fuck racism! (que se joda el racismo)”.
Durmaz fue apoyado por todos los jugadores del equipo sueco y por la federación de fútbol.
La Federación de Fútbol de Suecia fue enfática en su rechazo a los comentarios sobre Durmaz y emitió un comunicado en el que destaca que no será tolerado “que un jugador sea objeto de amenazas y abuso. Es espantoso lo que está sufriendo Durmaz”, sostuvo Hakan Sjostrand, Secretario de la Federación Sueca.