La tarde de este miércoles 8 de julio el paralelo se cotizaba en Bs. 558, 30, lo que significa 73,89 bolívares más que hace una semana ¿Qué puede hacer una persona para proteger su bolsillo frente a la inflación y la pérdida del valor de la moneda nacional? Economistas dan sus consejos y alertan que antes de tomar cualquier decisión debe evaluarse atentamente los riesgos que conlleva cada actuación.

Expertos recomiendan que ante este fenómeno una de las formas para protegerse es adquirir activos que no pierdan valor. La economista Tamara Herrera especifica que esta medida depende del alcance de cada persona. “Según la escala de sus ingresos, puede ser un repuesto de algo que posea, joyas e incluso inmuebles”, aclaró.

Para ella, este consejo es fundamental: “Si tiene un excedente en lugar de ahorrarlo, salvo que sea de uso rápido, salga del dinero y compre bienes”.  Califica la situación como una carrera contra la pérdida del valor del bolívar que afecta indiscutiblemente a cada venezolano.

Si puedes endeudarte, es el momento, porque las tasas de interés son reales negativas; lo que quiere decir que se encuentran muy por debajo de la tasa de inflación”, explicó, aunque hizo énfasis en hacerlo con raciocinio. “Es una excelente idea, pero hay que hacerlo con prudencia”. En este caso hay que estar atento a cualquier señal que haga el Gobierno en relación con las tasas de interés, porque puede influir en la posibilidad de los pagos y después verse imposibilitado para hacerlo.

Es importante no dejar el “bolívar dormido”; es decir, hay que convertirlo en “algo” que no pierda valor tan rápidamente, dijo. Luis Vicente León, desde su cuenta en Twitter, aseguró que los ahorros en la banca se “pulverizan”.

Es recomendable sacar ahorros de los bancos? La tasas de interés real es dramáticamente negativa. Los ahorros en banca se pulverizan.

— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 8, 2015

Otra opción que asomó Herrera son las pólizas de seguro que, aunque han subido, sigue siendo una forma de protegerse. “Una póliza debidamente estudiada es una ventaja si se preve el deterioro de un bien” , puntualizó.

El economista Ronald Balza advierte los riesgos. “Se pueden tomar distintas medidas de acuerdo con el alcance y disposición de cada quien, pero siempre teniendo en cuenta los riesgos, porque siempre los hay“.

“Si se compran bienes para revender, por ejemplo, está el riesgo de que posteriormente no los puedas vender”,dijo. Si es un carro, expresó el profesor de la Ucab, es importante estudiar dónde se va a estacionar, preguntarse si pretendes revenderlo, si se tiene a quién; si es un apartamento ¿y luego baja de precio? Hay que evaluar todos los riesgos, insistió.

Sobre los préstamos hizo énfasis en que no solo debe pensarse en protegerse de la inflación, sino proteger también la capacidad de endeudamiento. “Endeudarse en bolívares pensando que eso los protege contra la inflación porque la tasa de inflación es menor a la de interés está bien, pero lo cierto es que hay que pagarlo”, dijo. Si hay, por ejemplo, un riesgo de perder el empleo y así pasa luego no hay posibilidad de pagar, se pierde el crédito y es peor, comentó.

La adquisición de moneda extranjera “a cualquier precio” también puede ser una medida, pero Balza insistió en los peligros: “Tienes el riesgo de ser estafado si no conoces la procedencia del dinero, también de que el dólar baje si se toma por ejemplo la medida del aumento de la gasolina por parte del Gobierno y perder parte de tu inversión”.

El experto hizo un llamado a evaluar la situación personal de cada quien. ¿Cuánto dinero tienes?, ¿De dónde vienen tus ingresos? ¿Qué harás con ellos? ¿Conozco los riesgos? ¿Lo pongo en un banco en el exterior? ¿En qué país? ¿Dónde están más seguros? Son una serie de preguntas a responder antes de la toma de decisiones. La edad y los intereses y ambiciones de cada persona también influyen en las medidas. “Si te quieres ir del país cambias todo y te vas, pero si eres un adulto mayor preferirás invertir en salud o en tus nietos. Si eres un padre querrás un inmueble para tus hijos en un futuro, cada caso es distinto”, complementó.

“Todo depende del momento en el que estás. Inviértelo en el alma, viaja, estudia, haz algo que vayas a poder recordar, algo que va a servir para ti“, sugirió, porque preservar el valor de lo que se tiene en este contexto es difícil, concluyó.

María Laura Chang / @MarilaChang

Participa en la conversación

1 comentario

  1. Ninguno de los economistas se refiere a que éso se haga mientras renuncian el directorio del BCV y los ministros de la economía, y se logra un cambio de modelo. Tampoco mencionan que la dolarización es una manera eficaz de iniciar ese cambio… Los economistas como los entrevistados tienen una especie de doble moral y una contradictoria solidaridad automática con sus colegas del BCV. Desde la perspectiva macroeconómica se oponen a dolarizar y consideran que un 20 o 30% de inflación es como tolerable. Y desde la perspectiva del ahorrista y desde su propia perspectiva personal, siempre mencionan que hay que «refugiarse» comprando activos o divisas… Es decir, lo que aconsejan a ciertas personas con capacidad financiera, lo descartan como consejo general para toda la sociedad.

    Un argumento que esgrimen es que al dolarizar se pierde capacidad de maniobra ante shocks externos y la intención de promover una diversificación de las exportaciones. Eso es deshonesto si viene de personas que ya se «refugiaron» y esas maniobras no los van a afectar. Es deshonesto porque usan eufemismos para ocultar que tolerar tanto inflación distinta a un dígito bajo, como devaluaciones, significa realmente que nos empobrecen a todos de la noche a la mañana.

    Por ignorantes es que el resto de los ciudadanos toleramos estas malapraxis económicas. En la gran mayoría de los países, economistas así ni siquiera habrían logrado graduarse. El planeta entero, con muy pocas excepciones, abatió la inflación. Eso no significa que los desafíos que se plantean a economías que quieren crecer y diversificarse se resuelvan, pero sí es un problemón menos del que hay que ocuparse.

Deja un comentario