Los ojos de Pedro Gil brillaron al ver a su amigo Jesús Durán, de 60 años, llegar al anexo de la Clínica Asistencial Rafael Rangel, ubicada en la avenida Tamanaco de San Bernardino. Tras el incendio ocurrido en el geriátrico Chivacoa la noche de este 23 de agosto en el que fallecieron ocho mujeres; 18 de los sobrevivientes fueron trasladados al Hospital Domingo Luciani en El Llanito y, al día siguiente, ocho de ellos fueron reubicados en el mencionado centro.
“¡Estamos vivos! ¡Estamos vivos! “, le gritó sonriente Gil a su compañero, quien ingresaba auxiliado por uno de los enfermeros.
Durán sufrió hace cuatro años un coma diabético que le generó otras complicaciones como la trombosis que le redujo la movilidad de sus extremidades inferiores. Una vez dentro de la clínica, le pidió al enfermero que por favor lo sentara en una silla de cuatro patas y no la de ruedas en la que llegó, porque, según expresó, le recuerda a su época más difícil. “Gracias a Dios pude caminar y salir yo solo del incendio. Fue una pesadilla”, dijo. Su único hijo, Orlando, lo acompañó durante el traslado y aseguró estar agradecido por todas las atenciones que brindaron en el hospital Domingo Luciani, personal médico y del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss).
José Dacosta, encargado de la Rafael Rangel, informó que para este lunes 24 de agosto nueve personas mayores provenientes de Chivacoa ingresaron al centro. Una de ellas se retiró a otro sitio durante el transcurso de la tarde. La clínica cuenta con una sede principal en la Av. Los Próceres, también en San Bernardino. (www.sociobits.org) En la ubicada en la Av. Tamanaco llegaron las dos ambulancias con los ancianos cerca de las 3 de la tarde. Las instalaciones están descuidadas, la puerta de entrada está rota y el olor a orine impregna el sitio. El patio es de tierra, y para el entretenimiento de los abuelos solo hay una pequeña televisión en la sala.
Jesús Durán agradeció a los vecinos del barrio El Pedregal, ubicado detrás de Chivacoa, por su participación durante el incendio. “Esos fueron los que se metieron y ayudaron. Un muchachito que estaba montado en una mata de mango me vio y me dijo que me rescataría y luego allí lo vi”, expresó. También habló de los conserjes de los edificio vecinos cuya labor fue vital en el control de las llamas según testigos.
“Por suerte la manguera de este edificio es potente, casi como la de los bomberos. Con ella pude controlar el incendio, sino se quemaba todo”, expresó Jesús Morales, el conserje de las residencias Piedras Pintadas . El alcalde de Chacao, Ramón Muchacho, declaró en horas de la mañana de este lunes y reconoció las labores de los vecinos. También aclaró que Chivacoa era un centro “semiprivado”, que recibía subsidio por parte del Ivss. “No forma parte de las instituciones de la Juventud prolongadas del municipio Chacao”, puntualizó.
Reacción tardía
Una de las fallecidas fue María Melero, de 46 años, quien sufría enfermedades psiquiátricas que le impedían valerse por sí misma, según comentaron familiares. Su hermana Isabel estalló en llanto mientras describía su relación con María. “Yo la vine a ver el martes pasado, le traje sus cosas de uso diario. La vi. Estaba bien bonita. Ayer (domingo) iba a venir, pero decidí no hacerlo y nos enteramos fue por Twitter, porque a mí nadie me llamó”, expresó. “No esperaba que esto ocurriera”, dijo.
Uno de los abogados de Danilo Graterol, médico de Chivacoa, llamó en horas de la tarde a la familia Melero para informarles de la intención de la institución de pagar los servicios funerarios, pero en su caso prefirieron no optar por la espera y resolvieron realizar los actos en la Funeraria Hispania por su cuenta. El represante legal, Reinaldo Montero, informó que antes de comunicarse con las familias de las vícimas debieron declarar ante la Fiscalía, el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y el cuerpo de Bomberos.
Desde el Concejo Municipal de Chacao, Manuel Rojas Pérez, comentó que desde esa instancia se realiza una investigación. “Nos interesa saber en qué condiciones estaban estos ancianos, además de qué produjo el incendio”, dijo. Aún no se han podido comunicar con ningún propietario del geriátrico. Reiteró que a nivel judicial, es la fiscalía la que llevará el caso.
Según dieron a conocer en nota de prensa, el Ministerio Públicocomisionó al fiscal 27º del Área Metropolitana de Caracas (AMC), Heyker Campione, para investigar la muerte de las ocho mujeres, identificadas como Marlene Lozano (66), Adelaida Ávila (55), Nieves García (76), María Alarcón (60), María de García (74), María Meleno (46), Luisa García (72) y Yolanda Naya (75), en Chivacoa.