La frontera que separa al municipio Páez de Venezuela del Arauca colombiano, amaneció cerrada. El paso de las canoas bajo el puente internacional José Antonio Páez está suspendido y la circulación del transporte y de carga pesada restringido.

Los estudiantes que reciben clases en escuelas colombianas y que viven en el alto Apure, fueron los únicos que pudieron transitar la mañana de este miércoles 16 de septiembre, luego de que el presidente Nicolás Maduro decretara estado de excepción en este municipio, que ahora pasó a ser la “zona 6”, junto a dos municipios más (Rómulo Gallegos y Pedro Camejo) del estado.

El presidente de la Cámara de Comercio de Apure, Vito Vinceslao calcula que cerca del 40% de la población que vive en los tres municipios se dedica al comercio informal. Es decir, 61.403 personas se lucran de la venta de productos de todo tipo como consecuencia del deprimido desarrollo industrial en la zona.

“En el municipio Páez no hay industrias, no hay empresas y esto ha provocado que la gente se dedique al comercio informal, incluso al contrabando. Ese es el modus vivendi que asumió la gente bajo la mirada de los guardias nacionales. En el puente internacional es frecuente ver pasar a los muchachos con botellas de Coca-Cola de dos litros llenas de gasolina, venden los billetes de Bs. 100 y piden hasta 10 mil pesos. Puedes ver a los jóvenes con fajas de dinero para cambiar”, manifiesta vía telefónica el dirigente gremial.

La situación es similar en la zona 7. “En Pedro Camejo y Rómulo Gallegos se dedican a la agricultura y al sector ganadero, pero las condiciones son muy parecidas, no hay fuentes de empleo que satisfagan las necesidades de los habitantes lo que los lleva a la informalidad”, afirma Vinceslao.

Por el puente José Antonio Páez pasan a diario 300 camiones cargados de medicinas, ganado, materia prima y alimento.

Una medida esperada

La población fronteriza de El Amparo está desolada. Los colombianos de la zona comenzaron a devolverse a su país semanas antes de conocerse el decreto presidencial, confirmó una fuente que vive en la zona.

Los venezolanos que trabajan en Arauca tomaron previsiones y se quedaron a dormir en la aduana subalterna de El Amparo. No saben si su paso estará garantizado en la zona fronteriza que está bajo el mando del Contralmirante Antonio Clemente.

El gobernador del estado, Ramón Carrizalez, se pronunció a través de su cuenta de Twitter. Informó que evalúa, junto al vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, “el plan de acción para la zona 6”.

Carri
Carri2

Deja un comentario