El nuevo presidente de la Asamblea Nacional venezolana, Henry Ramos Allup, afirmó en su primer discurso que entre las prioridades de la fracción parlamentaria de la Mesa de la Unidad Democrática está promover “la cesación del gobierno en un lapso de seis meses”, por la vía constitucional.
La afirmación la realizó el parlamentario luego de que la bancada oficialista se retirara del Hemiciclo, en el que Ramos Allup tuvo que autojuramentarse debido a que el presidente accidental de la AN, el oficialista Héctor Agüero, no lo hiciera.
Luego de iniciar sus acciones como jefe de la Asamblea, Ramos dirigió la sesión para aprobar las designaciones de la nueva directiva. Posteriormente, dio la palabra al diputado de su bancada, Julio Borges, quien en un breve discurso planteó parte de la agenda parlamentaria de la nueva Asamblea. Este hecho molestó a la fracción del gobierno, cuyos miembros decidieron abandonar la sesión, argumentando que se había violado el reglamento de interior y de debate.
Ramos Allup tomó entonces la palabra para dirigirse a los asistentes.
“Deploro que los diputados del Polo Patriótico hayan abandonado el Hemiciclo en un momento trascendental, porque en esta Asamblea Nacional, por los próximos cinco años, habrá libertad de opinar y escuchar las opiniones divergentes “, afirmó.
“Yo no hablo como el presidente del Parlamento, les hablo como par y pensé traer un discurso escrito, pero preferí la improvisación con los riesgos que supone, y les quiero decir que así de dignos y entusiastas como entramos hoy, podamos salir cuando se venza nuestro período. Nuestra promesa en la campaña fue unidad y cambio, la unidad puede ser por unanimidad o por consenso, logramos concertar opiniones a pesar de la diversidad dentro de la MUD.”
Ramos enfatizó que “el pasado no se puede cambiar, tampoco podemos predecir el futuro, lo que podemos cambiar es el presente, un presente que está mal y hay que cambiarlo”.
Y en este mismo sentido, agregó: “El cambio que proponemos en constitucional, pacifico y de allí nadie nos va a sacar. Nuestras funciones y las del Ejecutivo pueden cesar antes de que acabe el período por algunas de las razones que señala la Constitución.
Continuó hablando: “Este lugar ha sido la voz del Ejecutivo, por eso hay que recuperar la institucionalidad”.
“Prometimos una Ley de Amnistía para acabar con la persecución (…) Y en tercer lugar, cambiar el Ejecutivo en un lapso de seis meses”.
Estas fueron las otras frases de Ramos Allup en su discurso improvisado fueron:
“También habrá muchas leyes de importancia por aprobar, habrá que sesionar varias veces a la semana, se acabaran las emboscadas legislativas”.
“No aprobaremos más leyes Habilitantes inutiles”.
Pese a la severidad de sus palabras, Ramos Allup aseguró que no serán un contrapoder ni una trinchera, al contrario: cumpliremos nuestro rol contralor.
“En los proximos días el Presidente de la República y sus ministros vendrán en los próximos días para rendir cuenta. Los recibiremos con la mayor cordialidad, no por rendirle culto a nadie, sino por nuestra condición cívica. Eso sí, diputados, habrá que interpelarlos y preguntarles qué han hecho. Va a venir a rendir su mensaje y los escucharemos con respeto, la sociedad venezolana quiere dialogo, el dialogo no es cobardía, sino un instrumento para acordar las partes y alcanzar resultados… Como poder autónomo ahora estamos dispuestos a tener diálogos públicos, como una Ley para la Reconciliación Nacional”.
El parlamentario cerró su intervención con la frase: “Que Dios nos bendiga a todos, que Dios bendiga a Venezuela”.