El papa Francisco lamentó hoy la situación de los miles de migrantes que cruzan la peligrosa selva del Darién entre Colombia y Panamá, y pidió «una respuesta humanitaria» para «evitar esta trágica realidad».
«Deseo recordar a los miles de inmigrantes que intentan atravesar la selva entre Colombia y Panamá. Se trata a menudo de familias con niños que se aventuran a recorridos peligrosos engañados por quienes falsamente les prometen una vía breve y segura, maltratados y robados», dijo tras rezar el Ángelus desde la ventana del Palacio Apostólico el papa, en el día de su 87 cumpleaños.
Y agregó: «No pueden perder la vida en esa selva. Hace falta el esfuerzo conjunto de los países más directamente interesados y de la comunidad internacional para evitar que esta trágica realidad sea silenciada y ofrecer una respuesta humanitaria».
El Tapón del Darién, una región selvática que separa la América del sur de la central y por donde han cruzado más de 500.000 migrantes este año, se ha convertido en una de las rutas más transitadas del continente y a la vez más peligrosas.
En ella los migrantes, además de tener que cruzar una selva llena de peligros naturales, están expuestos a la violencia debido a la presencia de redes de tráfico de personas que practican la extorsión y el secuestro. Las nacionalidades más habituales entre quienes cruzan esta ruta son venezolanos, haitianos y ecuatorianos.
Detienen miembros de red de tráfico
El 16 de diciembre autoridades colombianas detuvieron a nueve personas que formaban parte de una red de transportadores que traficaba con migrantes desde las fronteras con Ecuador y Venezuela hasta el municipio de Necoclí, informó este sábado la Policía.
Estas personas fueron capturadas en los departamentos de Nariño, Cauca, Huila, Santander, La Guajira y Atlántico y, al parecer, habían transportado al menos 294 migrantes, de los cuales 54 lograron llegar a Estados Unidos, detalló la Policía en un comunicado.
“Además les fueron materializadas las medidas cautelares de embargo y suspensión del poder dispositivo a 18 bienes muebles e inmuebles pertenecientes a esta organización”, añadió.
Esta red, según la investigación de las autoridades, traficaba migrantes, cubanos, haitianos, venezolanos, chinos, somalíes, indios, afganos y pakistaníes, entre otros, que cuando llegaban a Colombia eran llevados por carretera desde las fronteras con Ecuador, Venezuela y Brasil.