Los vecinos del Parque residencial Paraíso Plaza viven días difíciles. Al estar ubicados en la avenida Páez de El Paraíso, han experimentado de cerca la represión de cuerpos de seguridad del Estado y el enfrentamiento entre manifestantes y uniformados, pero además ahora son blanco de civiles armados.
La madrugada del pasado lunes 29 de mayo, una explosión en uno de los sótanos despertó de golpe a los residentes de este complejo, quienes encontraron cinco vehículos afectados, cuatro de ellos declarados como pérdida total. Según los habitantes, vecinos alcanzaron a ver a tres hombres no identificados que salieron del lugar donde se registró el siniestro.
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Dos días después, el 31 de mayo, sufrieron ataques por parte de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) durante la protesta convocada por la oposición en rechazo a la Asamblea Nacional Constituyente. Cerca del mediodía, un grupo de manifestantes se agrupó en la av. Páez a la altura del Centro Comercial Multiplaza Paraíso, edificación que se encuentra entre el Parque residencial Paraíso Plaza y el Conjunto Residencial Terrazas El Paraíso, también siniestrado en varias ocasiones desde que comenzaron las protestas en la zona.
De acuerdo con la dirigencia política local y varios habitantes, la GNB no dejó que llegara el grupo de manifestantes concentrado desde Montalbán para partir hacia la Cancillería de la República. Con bombas lacrimógenas y perdigones, atacaron a los participantes en la protesta, lo que trajo como consecuencia que un grupo de jóvenes de “la resistencia”, presente en el lugar, se enfrentara con el contingente militar.
Así nos persiguieron en El Paraíso. pic.twitter.com/G79ALdLPPz
— Jesús Armas (@jesusarmasccs) 31 de mayo de 2017
El enfrentamiento duró horas. Al día siguiente, 1 de junio, la entrada de los edificios aún olía a gas lacrimógeno y los restos de bombas reposaban en el pavimento y en bolsas de basura, luego de ser recogidas por la comunidad.
Noche de terror dejó un herido
La situación irregular se mantuvo hasta la noche. A las 9:00 pm había una tensa calma, pero según testigos, cerca de las 10:00 pm un camión negro irrumpió la “tregua” y tumbó el portón principal del complejo habitacional. Cuatro hombres ingresaron y rompieron los vidrios de tres vehículos estacionados e irrumpieron en la Torre A.
Dentro de la planta baja del edificio se pueden ver los destrozos, entre ellos un impacto de munición en el espejo del ascensor.
Los vecinos cuentan que durante el asalto, un joven llegó a la planta junto a su madre debido a un desperfecto en el equipo que le impide subir a su piso directamente desde el estacionamiento. Cuando el elevador abrió sus puertas, los civiles armados apuntaron a la mujer y a su hijo, quien logró escapar aprovechando un descuido de los agresores. Sin embargo, uno de ellos le disparó con una escopeta.
La acción de los residentes hizo que los hombres armados huyeran. El muchacho herido fue trasladado a un centro asistencial ubicado en el este de Caracas. La metra que fue usada como proyectil no tocó ningún órgano vital y su estado actual es estable. Quienes hacen vida en Parque residencial Paraíso Plaza, comentan que la familia prefiere no dar declaraciones formales en resguardo a su integridad física pues, de los cuatro sujetos que entraron a la fuerza, dos tenían la cara descubierta.
“Aquí ya no puedes manifestar”
Los vecinos sostienen que en los últimos días, la GNB no deja ni caminar a quienes se identifiquen como opositores al Gobierno de Nicolás Maduro.
“Aquí no dejan manifestar a la gente pacíficamente, de una vez (lanzan) bombas y perdigones”, expresa uno de los residentes, quien con ayuda de otros vecinos se ha encargado de reparar por sus propios medios los daños ocasionados, entre ellos el portón arrancado de sus bases.
“Eso que nos hacen a nosotros, eso es terrorismo“, dijo por su parte una integrante de la junta de condominio, quien adelantó que en las próximas horas llevarían la denuncia al Ministerio Público tal como hicieron con el caso de lo vehículos calcinados días atrás.
Los daños materiales se calculan en millones de bolívares. No obstante, la comunidad se organiza para hacer reparaciones y crear un grupo de vigilancia en aras de garantizar la seguridad de las viviendas y sus propietarios. Asimismo, afirman que no dejarán de manifestar pacíficamente.
“Sí, nos han robado todo. Le han robado la dignidad al venezolano. Nos tienen viendo bolsas para ver qué se consigue, nos tienen mendigando, haciendo colas, buscando medicinas. Eso no es vida, te estás desgastando”, expresó una de las residentes.
Desde que comenzaron las protestas en contra de la ruptura del orden constitucional y el llamado a una Asamblea Nacional Constituyente, se han registrado daños a la propiedad privada en al menos cinco conjuntos residenciales de El Paraíso, parroquia ubicada al suroeste de Caracas.
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