La hija del exdirigente sindical Juan Valor, Damaris Valor, pidió atención médica para su padre, a quien mantienen detenido desde el pasado 9 de enero en el Comando Nacional Contra Extorsión y Secuestro (Conas) de la Guardia Nacional Bolivariana en Puerto Ordaz, estado Bolívar.
En un video que compartió la ONG Provea, Valor dijo que en la última audiencia a su padre pretenden juzgarlo a 25 años de prisión bajo los cargos de terrorismo, incitación al odio y resistencia a la autoridad.
El exdirigente sindical es un hombre de 66 años de edad, que tiene parálisis facial, en la mitad de su rostro, y sufre de hipertensión arterial.
«Desde el 9 de enero mi familia y yo nos encontramos devastados por esta situación. Mi padre es un hombre mayor que sufre de hipertensión arterial y en este momento tiene la mitad de su cara paralizada. Hemos solicitado ayuda médica que se le ha negado. Es un hombre inocente de lo que se le está acusando», señaló la hija en el video.
Hizo un llamado al fiscal general de la República, Tarek William Saab; a la gobernadora de Bolívar, Yulisbeth García, y al presidente de Sidor, Sandi Villarroel para que intercedan a su favor y le den libertad a Valor.
A Valor lo detuvieron en San Félix
Contó que lo detuvieron hombres encapuchados que lo bajaron de su bicicleta cuando iba a casa de un amigo el pasado 9 de enero en la localidad de Nueva Chirica, en San Félix. Aunque su esposa intentó introducir la denuncia sobre su desaparición ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) no le permitieron tramitar la petición. Dos días después se enteraron que estaba detenido en el Conas.
«Mi padre es un hombre inocente. Desde joven ha sido trabajador con más de 45 años de servicio en la Siderúrgica Alfredo Maneiro, donde tuvo una carrera sindical. Fue luchador por el beneficio de los trabajadores, la cláusula 97 de la contratación colectiva fue una de ellas», contó Damaris Valor, quien añadió que «es un hombre amoroso, buen padre, buen abuelo. Nos crió bajo los valores de la honestidad y no le ha hecho nada a nadie. Por esta razón hago este video para apelar a sus cargos y empatía».
Provea dijo que a Valor no le permiten tener abogado de confianza ni la familia tiene acceso al expediente. «En prisión, sin acceso pleno al expediente y abogados de confianza, el activista está prácticamente incomunicado y siendo víctima de violaciones al debido proceso», explicó la organización no gubernamental.
La familia solo puede conversar con él los días sabados y apenas por cinco minutos, y a pesar de que siguen pidiendo la atención médica por su condición de salud, siguen sin respuesta de las autoridades judiciales.