Una carpa, colchonetas, algunas sillas y varias pancartas pegadas a las columnas de la sede de Corpoelec ubicada en el Rosal, sirven de fondo para los rostros cansados de cinco trabajadores de la empresa que sostienen una huelga de hambre iniciada hace casi cinco días, el martes 7 de junio. Reynaldo Díaz, Norma Torres, Luis Canelones, Domingo González y César Hortelano exigen la pronta respuesta de sus peticiones. La más importante de ellas: la firma del nuevo contrato colectivo.
Con una infección en la garganta que dificulta su habla, el secretario general del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras Electricistas Similares y Conexos del Distrito Capital, Miranda y Vargas (STE), Reynaldo Díaz, de 58 años de edad y con 28 años de servicio, explica que la huelga busca presionar la firma definitiva del nuevo contrato colectivo que ampara a 42 mil trabajadores activos y 10 mil jubilados. El contrato actual tiene seis años vencido, y llevan esperando 1 año y 3 meses, aproximadamente, por la decisión sobre el que está en discusión.

La propuesta del nuevo contrato, que fue entregado el pasado 26 de febrero por una comisión negociadora, la tiene el presidente Nicolás Maduro, según aseguró. Incluye cláusulas económicas con ajustes en salario, HCM, tickets de alimentación, plan de jubilación, tabulador, bonos, entre otras. Mientras esperan respuesta, el sindicalista indicó que numerosos trabajadores de la empresa han tenido que empeñar y vender sus bienes para, de alguna forma, subsistir a la situación económica del país.
A su lado, el operador y secretario ejecutivo del Sindicato Profesional de Electricistas y Conexos del Estado Carabobo (SIPRECEC), Luis Canelones, informó que los últimos tres aumentos no han sido aplicados al tabulador que tiene la empresa, y de los 12 niveles que comprende, el nivel 10 está a la par del sueldo mínimo nacional en la actualidad. El pago del 1.5% por encima del salario mínimo nacional establecido en el contrato ha sido incumplido y denuncia también que no ha recibido el pago de su salario desde diciembre.

Asimismo, explicó que no sólo es en la capital donde este tipo de protesta está ocurriendo. “En Aragua, tres compañeros han tenido que desistir de la huelga de hambre por recomendación de la Cruz Roja y se encuentran hospitalizados”, precisó.
En la oficina de El Rosal también se encuentra Domingo González, de 55 años de edad y Secretario de Organización del STE, con 38 años en la empresa, quien expone que su lucha tiene como meta, además de la firma del contrato colectivo, el cese a la persecución y el reconocimiento de la libertad sindical por parte de Corpoelec.
Agregó a esta lista de motivos la liberación de sus compañeros de Termozulia, quienes fueron detenidos luego que el ministro de energía, M/G Luis Motta Domínguez, los acusara de terroristas y saboteadores por, supuestamente, haber sacado un tapón del depósito de aceite de una de las turbinas, lo cual paralizó la unidad que maneja 160 megavatios.
Cansado, hipertenso y con la estela de un dolor de cabeza prominente, comentó: “la burla ha sido constante”, porque la problemática del nuevo contrato colectivo ha pasado de mano en mano (de ministros al Ejecutivo y viceversa), sin obtener solución. “Dicen que es por falta de recursos, pero han firmado contratos colectivos con maestros, Pdvsa… nosotros también somos importantes”, expresó. Indignado y desmotivado, recalcó a Efecto Cocuyo que los trabajadores de la empresa eléctrica nacional tienen vocación de servicio, por lo que merecen respeto a sus reivindicaciones salariales.
González considera que las instancias conciliatorias han fallado y responsabiliza al Presidente por la tragedia que están viviendo 52.000 familias del sector eléctrico, luego de ver a sus compañeros llorar porque ganan entre Bs. 2 mil y Bs. 3 mil semanales, que “no alcanzan ni para un cartón de huevos“.

Deshidratada y con tensión baja, Norma Torres, de 44 años de edad, habla desde una colchoneta maltrecha en el piso de la sede de Corpoelec. Relató que le tocó “taxear” para subsistir; recibió ayuda de sus compañeros por un tiempo, vendió prendas y hasta el microondas, pero aún así no puede darle la mesada a sus dos hijas de 19 y 21 años de edad, a quienes pudo mantener dignamente en el pasado con el sueldo que recibía.
Denuncia que ha sido víctima de acoso laboral, y luego de haber presentado su caso al Ministerio del Trabajo, a la Defensoría del Pueblo y al Procurador, sigue sin respuesta alguna. Procurando mantener un carácter fuerte por ser dirigente sindical como secretaria de finanzas de Siprecec, confesó que tuvo que ocultarse para llorar en una bomba de gasolina o en el baño de la oficina por la dura situación que atraviesa. “La directiva de la empresa es militar y nos tratan como soldados. Pero como soldados enemigos; no nos ven de ninguna manera como aliados“.

Corpoelect responderá… antes del 17 de junio
El pasado miércoles 8 de junio, los huelguistas sostuvieron una conversación con el jefe de talento humano de Corpoelec, G/B José Aniceto Torrealba Torrealba, quien dijo que no debería pasar del próximo viernes 17 de junio para que se conozca la respuesta a las demandas que mantienen en huelga de hambre a estos trabajadores. Tanto Díaz, como Torres, Canelones, González y Hortelano no planean cesar su protesta hasta que reciban un verdadero compromiso para la firma del nuevo contrato colectivo.

koño q pena ,como tienen a esta empresa q siempre fue prestigiosa cuando era CADAFE ahora es una maldita corporacion y q dirijida x unos ineptos q saben esos malditos militares d energia …soy jubilado desde el año 2003 y no han homologados esos sueldos por eso considero a mis compañeros huelguistas ,,,y fui gerente d planta mi ultimo cargo y q ganando una quincena una miseria d 13mil bs….el koñisimo e su madre todo este maldito regimen y esto es para ti maldito maduro manda a firmar esa miseria q nos vas a DAR koño e madre y con tantos ineptos en nomimas q tienes para jalarle bolas a tus seguidores maldita sea tu generacion malditos militares y tambien tu angel navas para q sepas …te la pasas con ese maldito con el hombro arriba d jaleti y no has logrado q firmen esa miseria malditos hipocritas……pobre d los jalabolas q estan contigo……koño ya FIRMEN ESA MIERDAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA