Un grupo de 60 personas espera en la plaza Parque Carabobo frente a la sede de la Fiscalía General de la República. Más de cien se quedaron en el barrio La Quinta de la Cota 905 “por miedo”. A pesar de que trataron de convencerlos toda la mañana, solo 60 se atrevieron a denunciar los presuntos atropellos policiales en el operativo realizado el pasado 13 de julio… pero se devolvieron con el mismo temor. La respuesta del Ministerio Público fue: “no nos pueden dar una medida de protección colectiva”.
Tres de los que fueron detenidos ese lunes, están en el grupo. Uno tiene 17 años, a su lado está otro de 16 años junto a su padre, a quien también sacaron de su cama “en interiores” a las 5:00 de la mañana cuando más de 200 funcionarios de los cuerpos de seguridad tomaron la “zona de paz”.
“Me sacaron sin camisa y sin pantalones. Yo estaba durmiendo cuando me agarraron y me llevaron a El Tanque –un sector del barrio-. Ahí me tuvieron hasta las diez de la mañana descalzo, a cada rato me golpeaban y me arrancaron los zarcillos de las orejas”, cuenta el joven de 16 años mientras muestra su lóbulo izquierdo roto y con una costra de sangre seca.
A su papá también se lo llevaron detenido, “sin hacer preguntas, sin hablar, sin una orden”. La esposa tenía 3.100 bolívares en la cama que le había dado una de sus hijas el día anterior. Los dejó debajo de la almohada y cuando la policía entró, “desaparecieron”. El escaparate y el televisor pantalla plana que habían logrado comprar hace dos años por 3.600 bolívares, se los tiraron al piso.
“¿Ahora si te la vas a tirar de arrecho, mamagüevo?”, repite el adolescente de 17 años. “Así me decía uno de los policías cuando nos llevaron al Destacamento 51 de El Paraíso. Nos tenían agachados y con la cabeza entre las piernas por horas. Cuando ponía las manos en el suelo porque sentía que me iba a caer, me las pisaban”. Su teléfono Verykool, que le costó 10.000 mil bolívares el año pasado, le fue robado, al igual que los 1.700 bolívares que tenía en la cartera. “Lo único que me dejaron fue este billete de cinco bolívares de los de antes”.

Los dos hijos de Carmen López, de 23 y 21 años, también fueron detenidos. Su casa fue una de las mil a las que entraron los funcionarios en ese sector. A ella también le robaron su televisor Samsung, que no era pantalla plana, “pero valía una platica (…) y los 2.000 bolívares que tenía para ir al mercal, me los robaron. Estaban debajo de un cofre de corazón que tenía en la peinadora”.
Los efectivos policiales se llevaron a 214 personas del sector La Quinta, de acuerdo a las cuentas de los habitantes del barrio. “En la zona de abajo –barrio San Miguel y Barlovento- se llevaron más y de allá es de donde son los muertos, que no sabemos si eran malandros o no”, dice uno de los hombres que acompaña el grupo en la plaza. No quiere identificarse pero agrega: “A los malandros no los agarraron, se llevaron a pura gente inocente. Mi tía, lo que querían era hacer bulto para decir que agarraron a bastantes malandros y que arrechos son, pero eso es mentira. Se llevaron a los inocentes”.
A las 2:30 de la tarde salieron los cinco representantes de la Cota 905 que se reunieron en sede de la Fiscalía General de la República. De acuerdo con su testimonio el director de Derechos Fundamentales del Ministerio Público les dijo que tendrían que acudir el lunes 20 de julio para que cada uno de ellos hiciera la denuncia de su caso.
El vocero del Consejo Comunal “Guerreros de La Esperanza”, Raúl Ortuño, es uno de los que entró a la reunión. “Mire, ayer fuimos a la Defensoría y nos mandaron para acá y de acá nos vuelven a mandar para allá. Nos vamos a devolver con la misma desesperanza y el mismo temor de que los policías vuelvan a entrar a las casas a hacer lo que les dé la gana. El día que Jorge Rodríguez vino a hablar y a prometer un poco de cosas, los del Sebin y Cicpc volvieron a entrar a las casas vacías y se llevaron hasta cocinas”.
Más de cien casas fueron abandonadas tras el operativo. De las cifras oficiales -134 detenidos- solo quedan 19 en la sede de Interpol y el Saime. “Allá tienen a los colombianos, pero esa es gente que tiene años aquí. Mira, mami, te podemos asegurar que esos no son paramilitares. En la Cota 905 no hay paramilitares”.


Provea los acompañó
El coordinador de Investigaciones de Provea, Inti Rodríguez, también entró a la reunión en la Fiscalía tras recibir la denuncia de doce familias de detenidos en el operativo de la Cota 905. “Ellos hablan de al menos 20 menores de edad detenidos que fueron objeto de tratos crueles y degradantes. Permanecieron más de 14 horas agachados en un recinto de la comandancia de la PNB”, indicó.
“Se está incurriendo en la vieja práctica, tan rechazada y criticada, donde todo el mundo era detenido y después que golpeaban y maltrataban eran puestas en libertad porque no había ninguna acusación. Eso lo criticó el presidente Chávez”, aseguró.
Ismael León, miembro de la dirección nacional de Voluntad Popular, también acudió al Ministerio Público a denunciar a uno de los conductores del programa Zurda Konducta, Oswaldo Rivero, por relacionar al partido político de oposición con bandas delictivas de la Cota 905.
Vanessa Arenas / @VanessaVenezia
Hermoso, entonces el «operativo» fue un atraco masivo?…