El año escolar 2024-2025 llegó a su fin de manera oficial. Gremios y organizaciones han asegurado que este periodo no fue positivo para la educación venezolana en general, en especial para el sector público; no obstante, del lado de quienes regentan el sistema educativo del país aseguran lo contrario.
En una reciente publicación del Ministerio de Educación, el titular de esta cartera, Héctor Rodríguez, afirmó que este año escolar refleja «un notable repunte en la calidad y el alcance del sistema educativo nacional».
Rodríguez asegura que hubo muchos logros alcanzados en cinco objetivos estratégicos establecidos para su gestión, entre ellos «la inclusión, la calidad educativa y la recuperación de la normalidad», tras los desafíos de la pandemia por Covid-19 en 2020.
«Uno de los mayores éxitos fue el crecimiento de la matrícula escolar. Más de 365.000 nuevos estudiantes se incorporaron al sistema, elevando el total de inscritos de 5.570.942 a 5.936.005. Este aumento evidencia los esfuerzos por garantizar el acceso universal a la educación. No nos detendremos aquí”, aseguró Rodríguez.
Dijo también que la presencialidad también marcó un hito y que 95.1% de los estudiantes asistió regularmente entre cuatro y cinco días a la semana, lo que dejó atrás los horarios fragmentados de la pandemia, llamados «horarios mosaico».
En cuanto al personal docente, afirmó que el déficit de maestros se redujo en un 62%, al pasar de 66.894 a 25.393. «Además, más de 100.000 educadores se sumaron a programas de formación continua, duplicando la cifra del año anterior y fortaleciendo la profesionalización del sector», expresó.
Otras cifras que presentó en su balance de este año escolar indican que se rehabilitaron 1.415 planteles; se entregaron 151.777 mesas y sillas; y se «fortaleció» el Programa de Alimentación Escolar (PAE).
“Esto ha permitido mejorar la frecuencia, cobertura y calidad de los platos que llegan a los comedores escolares”, señaló Rodríguez, quien también subrayó el “impacto positivo” en la nutrición de los estudiantes.
Rodríguez reiteró el llamado a que en agosto se realice una jornada casa por casa para identificar y captar a más niños y niñas en edad escolar que aún no están en las aulas y a dejar abiertas las escuelas públicas para que los estudiantes reciban alimentos a través del PAE.
El ministro también hizo un llamado a las instituciones educativas para garantizar actos de promoción «inclusivos», sin cobros ni exclusiones para que todos los estudiantes puedan celebrar el cierre del ciclo escolar «con dignidad».
Anunció que las actividades complementarias, como clases de nivelación y actos de grado, se extenderán hasta el 31 de julio, con algunas programadas para agosto.
Nuevamente, no se refirió sobre aumentos de salarios para los docentes.