En la redacción del Correo del Caroní hay incredulidad, pero no sorpresa. Los periodistas y fotógrafos esperaban que el juez dictaminara la culpabilidad del director del semanario, David Natera Febres, como lo hizo a la 1:00 de la madrugada de este viernes 11 de marzo, porque, afirman, se trata de un “pase de factura”.
El ambiente de aflicción se mitiga con el ímpetu que asegura tener el equipo del Correo del Caroní para seguir en su labor periodística y con la misma línea editorial.
Cuatro periodistas y un fotógrafo cuentan a Efecto Cocuyo cómo han vivido el proceso judicial puertas adentro.
“No te voy a decir que algunos en la redacción están afligidos, pero el ambiente es de mucho ímpetu. Anoche (jueves) estuvo aquí Natera y nadie estaba con caras largas. Aquí no hay lamentos ni llanto, aquí vamos a seguir con la misma línea editorial”, manifestó el periodista Marcos Valverde quien tiene 10 años en el Correo del Caroní.
La opinión es compartida por la periodista Pableysa Ostos. “Espero que los colegas y los medios se pronuncien porque hoy es el Correo con un juicio y El Carabobeño con falta de papel, mañana puede ser cualquiera. No se puede tener miedo de investigar porque esa es nuestra función”, dijo.
Para algunos, este medio ha sido más que una escuela. El fotógrafo William Urdaneta lleva más de dos décadas de trabajo en el ahora semanario. Comenzó como personal de seguridad, luego tuvo la responsabilidad de distribuir el periódico y actualmente se desempeña como fotógrafo. “Para mi el Correo ha sido todo, mi familia y mis hijos han crecido ahí”, dijo.
El camino a la sentencia. Las irregularidades comenzaron con las extensiones maratónicas de las audiencias que iniciaban a las 9:00 de la mañana y terminaban a las 8:00 de la noche o en la madrugada. “Se llevó a cabo un juicio ilógico por un hecho de corrupción comprobado. Los convocados llegaban a las 9:00 am y salían a las 8:00 pm, el demandado es un señor de 79 años con una trayectoria impecable. La actitud del juez ayer, en los tribunales, fue todo lo contrario a lo imparcial. El Poder Judicial perdió la vergüenza”, manifestó Susana Reyes, quien labora como secretaria en la dirección del periódico desde hace más de 20 años.
El dictamen obedece a una denuncia interpuesta por el empresario Yamal Mustafá, quien estuvo preso dos años por estar presuntamente implicado en el caso de la Ferrominera hasta que su causa fue sobreseída.