La madre de Chaín Barrera lloraba en las afueras del Rodeo II. Denunció que su hijo fue asesinado por una bala en la cervical y murió desangrado, según el testimonio de quienes se encuentran en los alrededores del penal. Desde hace más de 72 horas está planteada una situación de rehenes en el penal, ubicado en Guatire.
El motivo de la protesta estaría relacionada con la falta de comida. Desde el mediodía del viernes, 16 de octubre, los presos se amotinaron por falta de alimentos. Como medida de presión secuestraron a varios custodios, un médico, una trabajadora administrativa y al profesor de educación física, quien presuntamente resultó herido por una bala.
La piedra de tranca en “la negociación” entre las fuerzas públicas y los reclusos son los traslados. Saben que producto de la protesta, muchos de ellos serán llevados a otros penales; pero se niegan a que sea a los que tienen régimen cerrado como El Dorado, Uribana o Coro. La rutina en estas cárceles modelos es mucho más estricta y las visitas de familiares son una sola vez al mes.
También exigen la presencia de la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, para que se encargue de la situación. Hasta la noche del domingo, la funcionaria no se había pronunciado, ni siquiera por la red social Twitter, en la cual solo había publicado material proselitista.
De acuerdo con información extraoficial, uno de los custodios fue herido por una granada. Se supone que este penal no debería tener armas.
En Rodeo II hay 600 personas privadas de libertad, aproximadamente.