La sociedad venezolana no conoce el cronograma electoral pese a que han transcurrido seis meses desde que la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, anunciara que las elecciones de gobernadores serían convocadas en el primer semestre de 2017.
La protesta ciudadana tampoco puede ejercerse libremente porque cuerpos de seguridad del Estado reprimen a los manifestantes. En este contexto de conflictividad social, el politólogo Guillermo Tell Aveledo afirma que “a la sociedad le han sido robadas sus herramientas de lucha”.
“La marcha de este 19 de abril tuvo un efecto simbólico, pero más allá de la enormidad de personas que manifestaron su rechazo al Gobierno, esto no termina de hacer mella en la unidad de la clase dominante. Quienes manejan los hilos del poder están dispuestos a seguir reprimiendo”, manifiesta el analista.
Sin embargo, Tell Aveledo señala que la oposición debe seguir insistiendo en las formas constitucionales de protesta. “La oposición debe resistir hasta que se dé el proceso electoral porque cambiar la táctica a algo más ofensivo traiciona los principios democráticos (…) El Gobierno busca que la oposición se frustre y radicalice”, apunta.
¿Qué país tenemos después del 19 de abril?
“Tenemos el mismo país del 18, pero peor porque el Gobierno puede reclamar una victoria importante en términos de evitar el supuesto golpe de Estado del que acusa a la oposición. En términos concretos, ningún bloque (político) movió sus posiciones. Todo ha permanecido igual salvo el costo de fallecidos y heridos. No hay efecto profundo más allá de una fuerza de movilización que revela de la oposición y el musculo represivo del chavismo”, manifiesta.