El diálogo podría llegar a su fin tras cuatro semanas de negociaciones entre Gobierno y oposición. El gobernador del estado Miranda y dirigente opositor, Henrique Capriles, advirtió que la próxima reunión entre las partes, fijada para el martes 6 de diciembre, podría ser la última si no se producen resultados concretos.
“Por lo que yo veo, si el 6D no hay resultados, monseñor Celli (el emisario del Vaticano) tendrá que darle cristiana sepultura al diálogo”, aseguró en una entrevista ofrecida a Unión Radio. Señaló al Gobierno de usar el debate de los sobrinos Flores que se dio en la Asamblea Nacional como excusa para levantarse de la mesa de negociaciones.
El gobernador del estado Miranda insistió que el referendo revocatorio no está muerto y agregó que la Mesa de la Unidad Democrática debe llevar la agenda electoral a las conversaciones con el Gobierno.
“Si no hay resultados en el diálogo, ¿qué valor tiene este proceso? Aquí queremos la agenda electoral. Ese es otro punto que se debe tocar en la reunión del 6D“, dijo. Ambas partes acordaron crear una mesa técnica para evaluar este punto, que está actualmente conformada por Carlos Ocariz (MUD), Jorge Rodríguez (Psuv) y Martín Torrijos como coordinador.
Capriles también resaltó el papel que ha asumido el expresidente de Gobierno español y mediador de la Unasur, José Luis Rodríguez Zapatero, quien habría dicho el pasado martes, 22 de noviembre que el Gobierno se retiraba de la mesa de diálogo. Sin embargo, un día después el intermediario aseguraría que el Psuv continuaba en las negociaciones.
“Si él va a seguir siendo mediador, que sea serio (…) No no los vamos a calar los venezolanos”, dijo sobre la actuación de Rodríguez Zapatero.
En cuanto a la denuncia consignada por la canciller Delcy Rodríguez ante el Ministerio Público, el gobernador dijo: “Esta es la misma señora que niega todos los problemas de Venezuela”.
El pasado miércoles, 23 de noviembre, Rodríguez tomó acciones legales contra el dirigente opositor por asegurar que los sobrinos Flores portaban pasaportes diplomáticos al momento de su detención en Haití.