La posibilidad de un cese al fuego bilateral entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) quedó pendiente para un nuevo ciclo de negociaciones entre las delegaciones de paz que este sábado cerraron en Caracas la reunión extraordinaria conjunta de la mesa de diálogos.
Dicha ronda quedó fijada para el 13 de febrero, en México, donde además se abordará el tema de la participación de la sociedad en la contrucción de paz y se hará examen conjunto de los logros y dificultades en la implementación de los acuerdos alcanzados en el primer ciclo.
«De manera simultánea, se empezará a tratar y acordar un cese al fuego bilateral», señala la declaración conjunta leída y transmitida por el canal del estado Venezolana de Televisión (VTV), luego de concluir el encuentro.
La mesa de diálogo valoró «la franquesa y profundidad» que tuvo el proceso de discusión y convino en mantener los mecanismos de comunicación en los períodos donde no estén reunidos. «Los acuerdos son para cumplirse, la bilateralidad, el carácter político, el reconocimiento mutuo, la confianza y la buena fe», destacaron como principios sobre los cuales se adelantan los diálogos.
Las partes igual «agradecen la comprensión de los medios de comunicación por respetar el carácter reservado que se requiere sobre algunos asuntos y su buena disposición para difundir los logros, alcances y superación de dificultades», expusieron.
Por otra parte, también «valora todas las propuestas, críticas, sugerencias, exigencias e iniciativas provenientes de la sociedad colombiana para un buen desarrollo de este proceso», añaden.
En la declaración agradecen y valoran a los anfitriones Venezuela y México que lo recibirá el mes próximo; mientras que destacan a los países garantes Chile, Cuba y Reino de Noruega, y a los países acompañantes que han sumado al proceso.
«En particular al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por su compromiso con este proceso de paz», concluyen.
Los representantes del Gobierno y del ELN se encuentran desde el martes a Caracas en la búsqueda de alcanzar acuerdos que permitan superar la crisis causada luego de que el presidente Gustavo Petro anunciara un cese al fuego bilateral que fue desmentido días después por el ELN.
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Petro ha defendido una política de «paz total» a la que pretende vincular a varios grupos armados que operan en el país para iniciar negociaciones de paz.