Alberto Lovera, de la asociación civil Aquí Cabemos Todos, aseguró que “una confrontación es una posibilidad” en el país, puesto que, tras las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre donde la oposición ganó la mayoría, “el mecanismo de poder, se trancó”.
Comentó que en su percepción los actores políticos, particularmente del gobierno, dan la impresión de “no saber bajo qué guion actuar. Algunos días los ves verdaderamente perdidos. Los ves actuando como si el Parlamento, nuestro Poder Legislativo, no existiera”.
Instó a buscar puntos de encuentro y conciliación, sin importar posturas políticas. “Tenemos prohibido cansarnos. Con esta crisis no es que va a perder el gobierno o la oposición, estamos todos montados en el mismo barco y vamos a sufrir todos. No sentarse a negociar es muy costoso”, aseguró.
Arnaldo Esté, de la organización, también hizo referencia a la crisis que, en sus palabras, “el gobierno intentó ocultar por mucho tiempo”. Señaló que la situación del país es “angustiante”. “El cuento del hambre, no es cuento. Lo ves en tu casa cuando te preguntas qué es lo que puedes comer, y ves que se puede comer lo que se consigue, no lo que quieres”.
También señaló que se debe continuar trabajando en pro de un mejor país, puesto que los proyectos sociales son proyectos que deben trabajarse permanentemente. “El país está tan deshecho que hay de todo por hacer. No hablo de reconstrucción, hablo de construcción”.
Como una alternativa para salir de la crisis, señaló que la organización tiene dos años hablando de un posible gobierno de transición. “Un gobierno de transición es necesario porque la medidas para superar la crisis son sumamente ácidas y exigen una dieta económica y moral”.
“Los espacios para encuentros hay que buscarlos, y a veces hay que inventarlos. Busquemos conversaciones que puedan terminar en negociaciones”, señaló.
“Tenemos que ser ciudadanos informados y propiciar espacios para debatir estos temas”, dijo Margarita López Maya, miembro de la Aquí Cabemos Todos. Señaló también problemas que considera serios y profundos para el desarrollo correcto del país, como la distribución de los bienes públicos: “aquí los bienes públicos no son públicos, son del gobierno de turno”.
También comentó que el gobierno no quiere aceptar que su proyecto no sirvió. “Ahora estamos más agotados, más deteriorados, más violentos, y esperando lo que parece ser un choque de trenes”.
López señaló que el oficialismo sigue teniendo “los poderes del Estado, la chequera petrolera y un apoyo muy grande”, por lo que un entendimiento va a ser muy difícil y se siente una radicalización de los factores políticos de parte y parte.
“Puede ser revocatorio, enmienda o elecciones, pero si no hay un acuerdo político antes, durante y después, vamos a volver a caer en lo mismo. Venezuela ya hizo un ensayo de una hegemonía de una y otra parte, nos toca sentarnos, analizarnos y buscar una salida”, culminó.
Para finalizar la intervención del grupo, habló la profesora María Teresa Urreiztieta. “La primera pregunta que nos hacen siempre es: cuándo va a ocurrir un estadillo social, o nos dicen que acabe de ocurrir el estallido para ver qué va a pasar”, señaló.
“Pareciera que no hay posibilidad de respeto, de un acuerdo democrático. La crisis está entrando dentro de las casas y nos interpela a diario”, comentó la profesora, para posteriormente añadir “no hay crisis sin cambio. Nos toca a nosotros construir un proyecto en torno al cual nos podemos reunir”.
También instó a trabajar unidos por el país. “Reconocernos y aceptarnos en la diversidad. Eso significa sumar e incluir. Sumar fuerzas, talentos, visiones, mundos de vida, libertades y esperanzas. Lo humano más allá del conflicto”, agregó.
Urreiztieta comentó que hay que crear, para no seguir “luchar por sobrevivir”, que es como ella califica la vida bajo las carencias de la crisis.