En suspenso. La cuarentena declarada en todo el país desde el 16 de marzo, para evitar la propagación del COVID-19, trajo consigo la paralización de varios procesos en el país. Entre ellos el trabajo del Comité de Postulaciones Electorales de la Asamblea Nacional para la escogencia de un nuevo Poder Electoral.
También dejó en el aire el esfuerzo para lograr mejores garantías electorales de cara a una contienda comicial.
El mandatario Nicolás Maduro expresó, el fin de semana, sus dudas sobre que este año puedan celebrarse elecciones de la Asamblea Nacional (AN), previstas en la Constitución. La razón: el combate al nuevo coronavirus es la prioridad.
Para el director del Observatorio Electoral Venezolano (OEV), Luis Lander, esta emergencia sanitaria, sin plazo para finalizar, genera mayor incertidumbre sobre un dilema no resuelto en el país en torno al tipo de elección a celebrarse: la fecha, bajo qué condiciones y la participación o no de todos los factores políticos.
“Las elecciones parlamentarias son ineludibles. El 5 de enero de 2021 debe instalarse una nueva Asamblea Nacional y antes de eso deben hacerse esas elecciones. Ahora si no las hay porque la emergencia amerita que sea así, lo ideal es que no sea una decisión unilateral de Maduro sino basada en un acuerdo nacional que convenza a todos los ciudadanos”, sostuvo Lander.
“A estas alturas de verdad, yo no sé si va a haber elecciones este año. Tenemos esta prioridad y hoy sería una irresponsabilidad de mi parte decir que tiene que haber elecciones”, dijo Maduro en una entrevista concedida a Alfredo Serrano Mancilla en el programa La Pizarra, de la Radio AM 750 de Argentina.
Aunque no es una decisión tomada, el gobernante dejó en el ambiente la posibilidad. Y con ello está en suspenso la renovación de la AN.
Panorama latinoamericano
Lander aclaró que la postergación de elecciones no es una situación que solo afecta a Venezuela. Hay además 50 países que mantienen en suspenso procesos electorales debido a la pandemia.
Algunos de ellos son Uruguay, Colombia, Brasil, República Dominicana y Chile con un referendo constitucional, donde hay elecciones que deberían realizarse este año. Ahora todos están en suspenso.
Indicó que en Uruguay por ejemplo, se llegó a un consenso entre todos los factores políticos, el Poder Ejecutivo, el Electoral sobre cómo se hará una vez superada la emergencia.
“Aquí debería suceder algo similar, aunque el tono unilateral forma parte de las decisiones de Maduro”, dijo.
La Corte Electoral de Uruguay decidió el 17 de abril postergar las elecciones departamentales y municipales previstas para el 10 de mayo hasta el 27 de septiembre. Previamente había comunicado a los partidos políticos que no podía asegurar el normal desarrollo del proceso.
Esfuerzo paralizado
A juicio del estadístico y analista político, Félix Seijas, la situación va más allá de ver a cuál bando político beneficia o perjudica más que se pospongan las elecciones, sean generales o parlamentarias. Esto porque la paralización del trabajo que adelantaba el Comité de Postulaciones Electorales es negativo para la lucha por mejores condiciones electorales.
“Si se toma en cuenta que el Gobierno quería retomar el control de la AN con una elección y superar las limitaciones que tiene para acceder a financiamiento internacional ante organismos como el Fondo Monetario Internacional, podría decirse que posponerla lo perjudica”, apunta.
Pero, añade, que si es por la presión internacional para que esas elecciones fuesen transparentes y que un proceso amañado no sería reconocido, entonces se puede afirmar que la suspensión del proceso comicial beneficia al chavismo.
“En cuanto a la oposición, como se querían elecciones generales y no parlamentarias, no debería representar mayor problema que se pospongan, además que se extiende el mandato de Juan Guaidó si lo vemos desde lo que representa su figura, pero se trabajó por mejore garantías electorales y este proceso quedó detenido”, advirtió, con lo que la discusión quedó en suspenso.
Expresó su preocupación en cuanto a que si se levanta la cuarentena de un momento a otro y si se fija una fecha, pueda no haber tiempo de hacer un cronograma electoral que asegure todas las condiciones.
Priva el control social
Para Seijas, en los actuales momentos el gobierno de Maduro está enfocado en aumentar el control social de la población. Ello por las cada vez más frecuentes protestas, especialmente en las regiones por el tema de la gasolina.
“La pandemia le sirve para aplicar controles más férreos. La situación con la gasolina es un drama y hubiera llegado a ser un problema más grande sin esta emergencia. Es el control sobre la gente para protegerla, según su óptica, y si eso pasa por suspender elecciones, lo hará”, aseguró.
La crisis en los servicios públicos, ya existente antes de la pandemia, también se agrava con el confinamiento, además de la escasez de alimentos y medicinas en las regiones, principalmente los estados fronterizos. Este lunes, pescadores y vecinos de la comunidad de Punta Araya, en el estado Sucre, fueron reprimidos por la Guardia Nacional durante una manifestación por falta de alimentos, gas y gasolina.