¿Nuevas presiones de EEUU apuntan a la repetición de elecciones presidenciales en Venezuela?  Analistas responden 
Oposición mayoritaria sigue reclamando triunfo electoral del 28 de julio de 2024

A poco más de un año de los comicios presidenciales del 28 de julio de 2024 y el denunciado fraude electoral por parte de la oposición, hay voces que vuelven a mencionar la posibilidad de una repetición de las elecciones, como eventual resultado de las nuevas presiones ejercidas por Estados Unidos contra la administración de Nicolás Maduro. 

Pero el análisis sigue apuntando a que nuevos comicios son poco probables. Aunque el politólogo, Jesús Castellanos Vásquez, consultado por Efecto Cocuyo, advierte que si se llega a empujar una negociación política entre Miraflores y la oposición mayoritaria, repetir la votación para escoger al Jefe de Estado podría ser una fórmula a considerar para destrabar el conflicto, pero no la única ni la más probable.

Para la consultora política, Carmen Beatriz Fernández, es una propuesta “difícil de comprar” y no es lo que estaría planteando la líder opositora, María Corina Machado, en estos momentos. 

La primera vez que se asomó la propuesta de repetir las elecciones presidenciales en Venezuela fue en agosto de 2024, en pleno pico de persecución política por las protestas contra los resultados electorales, anunciados por el Poder Electoral a favor de Maduro, con saldo de casi 2.000 detenidos en todo el país. 

La posibilidad fue rápidamente descartada tanto por la administración de Maduro como por Machado. Analistas políticos coincidieron que no estaban dadas las condiciones tras el denunciado fraude por parte de la oposición, que publicó las actas en manos de sus testigos y que dieron cuenta de un holgado triunfo de Edmundo Gonzalez con más de 60% de los votos. 

“No tiene sentido” 

En marzo de 2025, lo planteó el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, en declaraciones a un medio internacional: “El futuro de Venezuela le corresponde al pueblo venezolano. La solución es una elección legítima, observada, democrática, lo que no ha ocurrido». Sin embargo, admitió que la propuesta no era bien vista por el chavismo- madurismo, consciente de no ser capaz de ganar unos comicios en condiciones transparentes. 

Este 14 de agosto, voces como la del exministro de Información y Comunicación del gobierno de Hugo Chávez, Andrés Izarra,  lo vuelven a mencionar: “La estrategia es crear una amenaza creíble para lograr repetición de elecciones”, expresó, con el reporte de Reuters, sobre el despliegue de fuerzas aéreas y navales norteamericanas en el Mar Caribe para enfrentar “carteles narcoterroristas”, de fondo. 

“Marco Rubio ha asomado repetidas veces la posibilidad de hacer una elección y al decirlo lo que pretende es asomar un espacio de negociación o de renegociación; sin embargo, es difícil comprar esa propuesta, habida cuenta de lo que ocurrió el 28 de julio. No tiene sentido plantear nuevas elecciones cuando hubo un fraude tan grande y un proceso de represión brutal como el que se dio desde el régimen hacia la sociedad venezolana, inhibiendo las posibilidades de que se repitiera algo por el estilo”, sostiene la profesora Fernández. 

A su juicio, las declaraciones dadas por Machado sobre una eventual toma del poder y la recomendación que hace a funcionarios que  sostienen a Maduro, acerca de cooperar para una transición ordenada o “hundirse con él” porque queda “muy poco tiempo”, son una muestra de que la líder opositora “ataja” la propuesta de repetición y que “legitima” el proceso electoral que ya dio como ganador a González Urrutia. 

“La propuesta de Rubio no es inocente ni por desconocimiento de la situación, sino que posiblemente estén mirando otra fórmula que en estos momentos no podría elucubrar en qué consiste, pero no es una propuesta inocente”, acotó Fernández.  

“Falta ver alcance de la presión y las reacciones” 

Desde la mirada de Castellanos Vásquez falta ver, para esbozar posibles escenarios, cuánto impactará la presión de EEUU a Miraflores y las reacciones más allá de las declaraciones. Considera que es lo que definirá el mapa de los cursos de acción, que podrían incluir o no, nuevas elecciones. 

“Se podrían empujar posibles negociaciones y temas de negociaciones, porque no está claro por dónde pudiera darse la transición si se llega a dar y no hay una sola forma”, dijo. 

El experto electoral recalcó que hay muchas dudas en relación con las intenciones   y el verdadero alcance de la política exterior de EEUU, no solo sobre Venezuela, sino en el ámbito mundial. 

“Lo que me queda claro es que se guían por un claro interés económico y un cálculo político sobre el liderazgo de Trump. Las facciones a lo interno del gobierno del presidente de los EEUU dificultan el análisis”, acotó. 

Lo que sí cree es que las últimas medidas (duplicar recompensa por Maduro, declarar la guerra a los carteles de la droga, incautar bienes y el despliegue militar en el Caribe) constituyen “amenazas creíbles” para Miraflores y tienen un impacto, pese a que otros análisis las perciban como no contundentes o ambiguas por las negociaciones directas entre la Casa Blanca y Miraflores. 

La crisis venezolana, subraya Castellanos Vásquez, debe ser resuelta por los venezolanos, lo cual no significa que la presión internacional no tenga alguna incidencia. De darse una transición, acota, también son los venezolanos los que deben definir el rumbo, bajo el liderazgo legitimado en elecciones.  

Este 14 de agosto, el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, denunció otra supuesta incautación de explosivos en el estado Anzoátegui. Volvió a acusar a EEUU a través de su embajada en Colombia y a Machado de planificar atentados en Venezuela. Mientras, Rubio reiteró que no reconocen a Maduro como presidente.