El presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup, acompañando al diputado Julio Borges, ofreció declaraciones desde el Palacio Legislativo para marcar posición con respecto a las agresiones de las que fueron víctimas varios diputados el día de hoy en la sede del CNE.
Allup calificó los hechos violentos suscitados como “una vergüenza para el país” y criticó que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) constantemente emita sentencias no para castigar delitos, como los de hoy en el que Borges y otros diputados fueron golpeados, sino que las sentencias del TSJ busquen eludir el derecho de los venezolanos al referendo revocatorio este año.
El Presidente de la AN se refirió a las posibles acciones que según su cuenta de Twitter planea el TSJ en su contra en la que se le impediría viajar y lamentó que las acciones del órgano judicial vayan en contra de la constitución.
Además, alertó que en este momento el TSJ se encuentra creando varias sentencias para considerar como “tradición a la patria” cualquier expresión de los diputados que critique al Gobierno.
Como consecuencia de esta sentencia, cualquier diputado podría ser detenido y preso inmediatamente si el TSJ lo califica como “traidor a la patria”. Con esta medida, el TSJ busca “restringir la inmunidad parlamentaria al mínimo” para impedir que se opine en contra del Gobierno, dijo Ramos Allup.
“El Tribunal Supremo de Justicia abochorna la justicia”, expresó el diputado. Al mismo tiempo, denunció que los han amenazado con “meter colectivos en la Asamblea Nacional”.
Finalmente, Allup agregó que aunque “llueva, truene o relampaguee”, la presión cívica va a continuar hasta que se defina la fecha del revocatorio.