La noche del 20 de abril para el personal del Hospital Materno Infantil Hugo Chávez no fue fácil. Entre dos partos, el resguardo de las instalaciones, humo de basura quemada y gases lacrimógenos lograron desalojar a 52 pacientes del sitio a las 10:30 pm, mientras a fuera el sonido de las cacerolas fue opacado por las detonaciones.
De acuerdo con el testimonio de una enfermera, a las 7:00 de la noche aproximadamente un grupo de hombres encapuchados trancó la vía con escombros que pronto comenzaron a quemar y el humo penetró en el área de emergencia del centro asistencial.
Los trabajadores del hospital cerraron puertas y ventanas, en un intento de resguardar a los pacientes que se encontraban en esa sala. Mientras esto ocurría una mujer dio a luz en quirófano y otra iniciaba sus labores de parto.
Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) llegaron al sitio para terminar con la tranca y encontraron resistencia. Accionaron sus escopetas de bombas lacrimógenas.
“Los encapuchados iban y venían. Desde el hospital les pedíamos que se fueran, que la basura y las bombas estaban afectándonos”, dijo la enfermera.
Yorky Guerrero, doctora especialista en dermatología, estaba de guardia la noche del jueves 20 de abril. A su cargo estaban seis pacientes neonatos. “Estábamos muy nerviosos por el humo y las bombas. Luego escuchamos que gritaban por el área de emergencia. Los encapuchados decían que tenían hambre y decían groserías en contra del Gobierno. No lograron entrar. Allí decidimos evacuar”, aseguró.
Otra trabajadora del recinto señaló que los encapuchados lanzaron piedras, pero el equipo de Efecto Cocuyo no pudo constatar daños a las instalaciones. Se conoció que los empleados piden que se coloque una reja externa en la parte de emergencia para mejorar la seguridad.
Este viernes 21 de abril, el Materno Infantil amaneció custodiado por la GNB. Un camión de transporte de personal de este cuerpo de seguridad estaba apostado afuera y tres tanquetas también. Una de ellas mostraba signos de que había sido quemada.
En la tarde, Jorge Rodríguez alcalde del municipio Libertador (jurisdicción a la que pertenece El Valle) indicó que el motivo del desalojo se debió a que los manifestantes atacaron el Materno e intentaron quemarlo para “destrozarlo”.
