“Mi corazón está abrumado. Me viene a la cabeza un haiku de Jorge Luis Borges que corona la Academia de Santa Cecilia, en Roma: ‘Callan las cuerdas, la música sabía lo que yo siento”.
Así comienza el director de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles, Gustavo Dudamel, unas cortas pero sentidas palabras que dedicó como homenaje a su mentor, el maestro José Antonio Abreu, quien falleció este sábado 24 de marzo en la ciudad de Caracas, después de sufrir varias afecciones de acuerdo a su familia.
En el escrito que fue publicado por el diario español El País, Dudamel que no pudo estar en los actos velatorios para despedir al maestro este domingo 25 de marzo en el Centro de Acción Social por la Música en Caracas, lamenta la partida física de un hombre menudo, de voz pausada y suave pero que tuvo el poder desde su pequeño tamaño para formar el Sistema de Orquestas Sinfónicas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela.
“La música y el arte han perdido a una de sus más luminosas figuras. El Maestro José Antonio Abreu, como nadie en nuestros tiempos, nos enseñó que el arte es un derecho universal y que la inspiración y la belleza transforman irreversiblemente el alma de un niño, convirtiéndolo en un ser humano más pleno, más sano, más completo, mas feliz y, por ende, en un mejor ciudadano”, escribió el afamado director, quien es la cara más visible, famosa y de mayor proyección nacional e internacional del programa en el que participan actualmente 948.725 integrantes, en todo el país, que reciben formación en 44 núcleos.
“Seguiremos tocando, cantando y luchando por el mundo que el Maestro Abreu soñó, y por el legado de futuro que nos ha dejado. Honor y gloria eterna al Maestro José Antonio Abreu”, dijo el músico en el artículo que este domingo publicó el diario español en su versión digital.
Foto: La Radio del Sur
Para leer el artículo completo siga el siguiente enlace
Lea también:
Los comentarios están cerrados.